LA ROJA

Aprovechando la visita de nuestra campeona del mundo al estadio de los Cármenes no dejo de darle vueltas a la cabeza como deportista que soy y futbolista que fuí, en qué momento, de qué forma se produjo el "cambio", el despertar de nuestra selección, es decir, cuando y por qué comenzó el salto cualitativo de nuestra selección de fútbol. Si, ya se eso de que es una impresionante generación de futbolistas, categorías inferiores, experiencia, salidas al extranjero, fichajes por equipos de fuera, y si pudiese hablar el mismo Lissavetzky me argumentaría mil razones financieras y políticas del éxito. Sin embargo a mi esto de las medallas y del trabajo de despacho no me termina de convencer, tuvo que haber algo más. Yo mismo he asistido al televisor año tras año, eurocopa tras eurocopa y mundial tras mundial desde ARGENTINA 78 y aún habiendo buenas selecciones, buenos jugadores, e incluso buenos medios y apoyo desde todas las instituciones y buena y apasionada afición, aún faltaba algo, y ese algo creo que es el SIMBOLISMO. Si, y además en este caso creo firmemente que el símbolo se creó primero y después nació el equipo (mentalmente preparado para ganar). Estrujo mis sesos recordando la eurocopa 2008 y el posterior mundial 2010 y llego a la siguiente conclusión: Primero fue LA ROJA y después el éxito y no al revés.

Y sin que sirva de precedente diré algo bueno de una cadena de televisión, si, si, creo que fue telecinco o cuatro la creadora de ese simbolismo denominado LA ROJA, y con un nacimiento eminentemente infundido de intereses económicos, sin saberlo o quizás sí formó la simbología necesaria para crear el convencimiento absoluto tanto en el entorno como en las propias instituciones que rigen el fútbol y sobre todo en los propios futbolistas de que GANAR era posible, y aún sindo una selección potente con Luis Aragonés aún faltaba ese salto de gigante que ya tenían Italia, Alemania, Arentina, Brasil, ..., CREERLO, y para ello qué mejor que un simple y sencillo símbolo, UN COLOR, EL ROJO, LA ROJA.-

Ni Marco Polo podía imaginarse en sus viajes, aunque sí lo intuyó cuando lo trajo consigo, el valor y la simbología de un color cuando conoció en Afganistán el Lapislázuli, ese mineral escaso sólo registrado en el globo terráqueo en Euroasia como ya he dicho y en unas minas de Chile (las más grandes), en la cordillera de Ovalle, (también fue explotado creo en Perú). Dada su pureza, su ausencia de mezcla, fue no sólo un mineral buscado y pagado sino que el polvo extraido de dicho mineral, la azurita o Lazurita para extraer el color azul lo convirtió en algo más que una piedra, y no sólo por su valor económico, (llegó a valer cuatro veces el oro) sino por su valor simbólico, asistiendo a cómo un color puede formar parte de la historia de la humanidad, mejor dicho, modificarla. Pureza,salud, sin mancha, inmaculada, bella, estos adjetivos únicamente podían ser asociados a algo inmaterial y divino, la Virgen, y llega el Renacimiento para afirmar esto: no se concebía una pintura sin que la vestimenta de María fuse el azul, el más puro, y así todo lo divino, el cielo, el firmamento, Dios, la tierra y el mar, todo lo absoluto y lo divino en línea directa era y es azul, de hecho las reparaciones de azul de las pinturas actuales se realizan con el preciado mineral, y de tal guisa fue el azul que la nobleza se apuntó al carro, y la Francia del siglo XII y XIII se vistió también de azul pasando a ser también signo de poder y color de la fuerza contrapuesta al rojo. Por tanto un color simboliza primero y cambia el mundo después. Y por qué digo esto, pues lo digo como introducción al otro color, al más vivo de los colores, al más preciado, al más simbólico de todos y al más presente, EL ROJO. Ya su nombre es el más denominado en sinónimos relativos a los colores existentes, además de ser un color primario y ser el de más baja frecuencia al ojo humano: el rojo, el colorado, el cobrizo, el rojizo, el carmesí, el púrpura, el bermellón, encarnado, granate,etc.. y así una infinidad de denominaciones. El rojo es el color de los colores, y de hecho transformó la edad media, sombría y oscura, sin color, en algo preciado. El rojo es la sangre, el vino, y la consagración de Jesús. Pero el rojo es también el amor, la pasión, la luz intensa, el sol, y por ende es la guerra y en conseucencia Marte, es la vida y la muerte, es el calor que nos mantiene vivos y el fuego que nos destruye, el rojo es la revolución y el símbolo de ésta. La obtención del rojo como color en la historia es algo sorprendente, y aunque parezca increible procede de un gusano del Perú y más antiguo aún de unas conchas marinas de la India, y bajo procesos artesanales inimaginables y con exposición a la acción del oxígeno atmosférico se obtuvo el tinte preciado, con una elaboración exquisita y mágica dotada de paciencia infinita, algo así como también se hace con el vino, tinto, es decir, rojo. Y surgió el color rojo con la fuerza de un símbolo en la historia, y vistió a mujeres de todo el mundo, y fue el color de Castilla, de sus pendones, y el color de la dinastía nazarita, y el color del poder de la Iglesia y sus purpurados, y el color de advertencia de peligro, de los semáforos, de las señales, de la cruz roja, de las banderas, infinidad de símbolos con el rojo. Y es que hasta la Guardia Civil en un atestado, cuando hay sangre, cuando existe el rojo, realiza las fotos en blanco y negro para no crear una disposición mental en el observador y asi es estudiado en criminología a sabiendas de su poder. Recuerdan la famosa película de la lista de Schindenler, entre tanto horror de hambre, torturas, disparos etc., la imagen impactante de la película (en blanco y negro)fue el único color de la misma, el traje rojo de la niña perdida en la barbarie, con un color transformó Spielberg la opinión del espectador. Y así llego a la ROJA, el simbolismo creado por una cadena se transformó en sentimiento, después en autoestima, y tanto espectadores, aficionados como jugadores creyeron en el rojo, en la roja y en España, y eso, un color, aunque no lo hayan pensado transformó al equipo y nos dió el éxito. Lástima que nuestra BANDERA, casi toda ella roja, no fuese la que hiciera el milagro pese a ser el mayor símbolo de los españoles, va por ella.-

P.D.- Como el azul es el contrapuesto al rojo y para dar un poco por el culillo, la foto es de Piqué pero vestido de azul, que mira por dónde es mi color,y el d emis antepasados, Vale quien sirve....